domingo, 27 de diciembre de 2015

Por las rutas del PAB 3: De Sevilla a Dos Hermanas y regreso en el Cercanías

Las dos rutas anteriores fueron por la zona del Aljarafe y la Vega, ahora cambiamos de zona y nos dirigimos a la población de Dos Hermanas a la que, como veremos, se llega mediante una ruta que discurre prácticamente en su totalidad por vías ciclistas, con apenas algunas interrupciones cuya posible eliminación analizaremos.


En el mapa superior se ve la ruta (en verde las vías ciclistas existentes y en rojo las previstas en el PAB), que se corresponde con el carril-bici hasta la Universidad Pablo de Olavide, desde donde enlazaremos con la ruta marcada como SE-46 en el mapa, que bordea Montequinto hasta llegar a Dos Hermanas.


Salimos de Sevilla utilizando el carril-bici que discurre a lo largo de la Avenida de la Paz, para enlazar con la Pasarela sobre la SE-30. La foto superior corresponde al inicio de la ruta y la inferior al inicio de la Pasarela, señalizada como itinerario compartido con los peatones. 


La Pasarela en cuestión atraviesa la autovía de circunvalación de Sevilla SE-30, con pendientes y curvaturas mas que aceptables para su uso por los ciclistas. Solamente se le puede poner un pero a su diseño: la escasa altura de las barandillas, que no es suficiente para eliminar por completo la sensación de peligro al pasar en bicicleta sobre la autovía. Sería de desear que dicha altura de incrementase. Y un toldo u otro tipo de cubierta que protegiese del sol y la lluvia sería ya para "nota". 


Estamos sobre el carril-bici que comunica Sevilla con la Universidad Pablo de Olavide, una vieja demanda de "A Contramano" que ya en 1996 organizaba marchas ciclistas reclamándolo, como puede verse en la fotografía superior. El carril-bici se realizó finalmente en 2007, en el marco del Plan de la Bici de Sevilla.


Dicho carril-bici nos permite cruzar el Río Guadaira, uno de cuyos viejos molinos dejamos a la izquierda, como vemos en fotografía superior. A continuación pasamos por detrás del Centro Fitosanitario y cruzamos las vías de la línea C4 de cercanías y del Metro por el túnel que se muestra en foto inferior


con lo que llegamos al final de dicho carril-bici, ya en los terrenos de la Universidad Pablo de Olavide. En la foto inferior se ve el punto de llegada a dicha Universidad, muy cerca de la Estación de Metro, que se vislumbra al fondo.


Ahora se nos presenta el primer dilema ¿Por donde continuar hasta Dos Hermanas, salvando tanto la autovía Sevilla - Utrera como las vías del Metro, que discurren a nuestra derecha? 

Existe la posibilidad de callejear un poco por los terrenos de la Universidad hasta llegar a las urbanizaciones de Montequinto situadas a este lado de la autovía, y cruzar por la pasarela ciclista y peatonal creada para acceder a la Estación de Metro de Condequinto, al otro lado de dicha autovía. Pero el camino es tortuoso y nada evidente, y nos forzaría a dar un rodeo bastante absurdo. Si queremos que los ciclistas de Dos Hermanas (y de buena parte de Montequeinto) se desplacen a Sevilla con asiduidad en el marco de sus actividades cotidianas, sería preciso ofrecerles una ruta mas directa. 

Jaime Perea, ciclista afincado en Olivar de Quintos, junto con tres vecinos mas (Juan José García, Rafael Estévez y Pilar Rallo) tienen algunas ideas al respecto que nos ofrecen en su blog http://iniciativapedal.blogspot.com.es/. Juntos han recogido ya casi 1.000 firmas en apoyo de sus propuestas (que piensan presentar a los Ayuntamientos de Sevilla y Dos Hermanas). Jaime nos acompañará en lo que resta del recorrido. 



La ruta mas directa, que se corresponde con la primera alternativa propuesta por Javier en su blog, pasa por la entrada de la propia Universidad, a escasos metros a la derecha del final del carril-bici, para atravesar las vías del Metro mediante un túnel que posee en la actualidad un acerado de anchura suficiente como para albergar una vía ciclista en su primer tramo y una vía compartida con los peatones (que apenas utilizan esta ruta) justo en el tramo bajo el túnel. En la foto superior se muestra una vista general del paso, mientras que en la inferior se aprecia en detalle el paso bajo las vías.



A continuación giramos a la izquierda y atravesamos la autovía por la antigua pasarela peatonal (que ahora sería peatonal y ciclista) que se encuentra todavía en buen estado y presenta pendientes aceptables. Solo habría que recrecer las barandillas (y quizás ponerle una cubierta), como ya hemos mencionado en referencia a la pasarela sobre la SE-30, para adaptarla a su uso por los ciclistas. La foto inferior muestra el arranque de la mencionada pasarela


Una vez salvada la autovía, al final de la pasarela, giramos a la izquierda y continuamos durante unos metros por el camino de tierra que se ve en la foto siguiente, que discurre entre la autovía y los terrenos del Sevilla F.C.


Este camino desemboca en la Avenida de las Universidades, que comunica Dos Hermanas con la Universidad Pablo de Olavide, en el punto que se ve en la foto inferior


Es importante decir que dicha Avenida es la entrada natural desde Dos Hermanas y Montequinto a la Universidad Pablo de Olavide pero que, desafortunadamente, el tunel correspondiente bajo la autovía fue diseñado de tal manera que no se dejó espacio ni para el paso de los ciclistas ni de los peatones, pese a que, como veremos, la citada Avenida tiene tanto acerados como carril-bici. Una muestra mas de las incongruencias que a menudo acompañan a la planificación urbana cuando de peatones y ciclistas se trata. La foto inferior muestra el paso mencionado para cuyo diseño, como se ve, solo se han considerado las necesidades del automóvil. Solamente con que se hubieran tenido también en cuenta las necesidades de los peatones y los ciclistas en este paso concreto, ahora no sería necesario buscar un itineario separado para ellos. Lamentable. 



En todo caso hay que decir también que la ruta descrita mas arriba no supone apenas rodeo y que incluso hoy en día está practicable, aunque para permitir su uso diario y masivo haría falta construir algunos metros de vía ciclista y acerado y adecentar mínimamente la pasarela ya mencionada. Una inversión en todo caso bastante asumible por cualquier ayuntamiento (en el caso indicado, estamos en terrenos del Ayuntamiento de Sevilla).

Continuamos la ruta por la Avenida de las Universidades, en la divisoria entre los términos municipales de Sevilla y Dos Hermanas que, como su propio nombre indica, conecta Dos Hermanas con la Universidad Pablo de Olavide (con la salvedad hecha mas arriba si hablamos de ciclistas y peatones). Esta avenida, como se muestra en la siguiente foto, posee amplios acerados y vías ciclistas. 


La vía ciclista en cuestión es, en realidad, una acera-bici mono-direccional (tiene su contraparte en la acera opuesta) realizada con el mismo tipo de pavimento que la acera pero con adoquines de diferente color (no pintados simplemente). En la zona colindante con Montequinto, la mas utilizada, el acerado tiene anchura suficiente y la vía ciclista es cómoda de utilizar. Mas adelante, el acerado se estrecha, como se ve en la foto inferior, e incluso durante un breve tramo (señalado en rojo en el mapa mostrado al inicio) se pierde tanto el carril-bici como el acerado (solo en la cera de la derecha), aunque el arcén tiene anchura suficiente como para permitir el paso de las bicicletas y los peatones con comodidad. Dicho tramo coincide con el paso sobre el "Canal de los Presos". 



Un poco mas adelante se recupera tanto la vía ciclista como el acerado y llegamos así hasta la Rotonda del Hipódromo. De aquí parte hacia la derecha la conocida como "Vereda del Rayo", por donde Jaime propone también en su blog construir un enlace entre Montequinto y Bellavista, que quizás analicemos mas adelante en otra entrada de este blog.

 
A partir de la Rotonda del Hipódromo continuamos hasta Dos Hermanas por la ya citada Avenida de las Universidades. Como se ve en la foto superior, se trata de una Avenida de seis carriles de circulación con mediana, perfectamente urbanizada, que discurre en medio de la nada entre Montequinto y Dos Hermanas durante aproximadamente 10 km. A nuestra derecha hay olivares que, según lo previsto, han de convertirse en uno de los mayores parques del Área Metropolitana, el "Parque Forestal de la SE-40". A nuestra izquierda se extiende una zona perfectamente urbanizada en lo que a los viales respecta, incluidas las vías ciclistas que pueden verse en verde en el plano al inicio de esta entrada, pero deshabitada desde hace años. Uno mas de los macro-proyectos de urbanización de la última fase de la burbuja inmobiliaria que quedaron paralizados por la crisis.


Buena muestra de ello son las ruinas del "Club de Golf" que se preveía acompañase a las urbanizaciones, que dejamos a nuestra derecha y que muestra la foto superior. Y así, pedaleando entre olivos a la derecha y urbanizaciones fantasma a nuestra izquierda, llegamos por fin a Dos Hermanas, en el punto que muestra la foto inferior


En este punto, si girásemos a la derecha nos dirigiríamos en apenas unos metros a la carretera A-8032, la primitiva carretera Sevilla - Dos Hermanas, por donde el Plan Andaluz de la Bicicleta prevé que discurra una vía ciclista (ver plano al inicio). Si girásemos a la izquierda, llegaríamos a la carretera A-392 entre Dos Hermanas y Alcalá de Guadaira, por donde el PAB también prevé una vía ciclista (ver plano). Pero nosotros continuamos adelante para internarnos en el Casco Urbano de Dos Hrmanas, en busca de su Estación de Cercanías. Callejeamos, ya sin carril-bici, hasta llegar a la Estación, para lo cual hemos de pasar bajo las vías del tren por un túnel de dirección única para los coches, pero donde se ha previsto un paso "a contramano" para las bicicletas (y las motos) como se muestra en la foto inferior


Tras atravesar el túnel llegamos a la Estación de Dos Hermanas, un bonito y céntrico edificio neo-mudéjar que se muestra mas abajo


Aquí me despido de Jaime, no sin antes compartir unas cervezas comentando el itinerario y planeando como implicar a los Ayuntamientos de Sevilla y Dos Hermanas en las acciones necesarias para darle continuidad. Entro entonces en la Estación para tomar, con mi bicicleta, el cercanías hacia Sevilla y aprovecho para tomar unas fotos del interior de la Estación, en concreto de la zona donde se ha propuesto instalar unos aparcabicis que podrían en buena medida promover la intermodalidad bicicleta - cercanías entre los nazarenos (vecinos de Dos Hermanas para los no iniciados).


Ha sido un agradable paseo mañanero en bici de menos de 20 km que nos ha permitido conocer el itinerario en bici entre Sevilla y Dos Hermanas y, de paso, conocer las mejores soluciones para darle continuidad y consolidarlo como una de las posibles "cycle superhighways" del Área Metropolitana de Sevilla, un concepto nacido en Copenhague y que se está extendiendo por todo el  mundo. 

De paso hemos podido aprender algo acerca de las locuras a que nos ha conducido la burbuja inmobiliaria, las contradicciones en que incurre la planificación urbana a consecuencia de su obsesión hacia el automóvil privado y su desprecio del peatón y la bicicleta, o las posibilidades de la intermodalidad entre la bicicleta y el transporte público. ¡Y, además, hacer nuevos amigos!.





sábado, 14 de noviembre de 2015

Madrid sin coches ¿Y las bicis?

Madrid ha amanecido hoy sin apenas coches, como consecuencia de la contaminación que éstos producen, como muestra hoy esta foto de El País


Mientras la DGT nos bombardea con un anuncio que todos habremos oído, la realidad supera a la ficción y ya no se trata del tiempo y el dinero que se pierden en los atascos (at ... ascos que dice ahora la misma DGT que promueve la venta de cada vez mas coches). Ahora se trata pura y simplemente de nuestra salud, amenazada por la contaminación que los coches producen.

Pero las crisis son también oportunidades, como suele decirse, y la foto que reproduzco mas arriba, sin duda la foto del día en Madrid, tiene también sus aspectos positivos.  Pocas veces se ha visto en Madrid a un ciclista circulando con la tranquilidad del ciclista de la foto. ¿Y si aprovechásemos la ausencia de coches para llenar Madrid de vías ciclistas? A lo mejor, la manera de promover el uso de la bici no es haciendo anuncios que demuestren lo que ya todos sabemos (que los coches son un "asco") sino haciendo atractivo y seguro el uso de la bicicleta, algo que no creo que nadie en su sano juicio pueda decir que sucede ahora en Madrid. 

Y lo mismo valdría para los desplazamientos andando y en transporte público. 

Manuel Carmena, que es ciclista, 



parece que se se está pensando mantener el cierre del centro de Madrid al tráfico. Es de suponer que se refiera al tráfico motorizado, no al de bicicletas. Es una buena idea, pero si se limita a hacer eso, lo único que va a conseguir es desplazar los atascos y la contaminación a la periferia, donde automáticamente los buitres de siempre van a intentar forrarse con dinero público haciendo "aparcamientos disuasorios", que efectivamente van a disuadir a los madrileños de usar la bicicleta y el transporte público para acceder al centro.

Hay que ir mas lejos pues, y una buena solución podría ser la que sugiere la foto que abre esta entrada: reservar espacios para la bicicleta en el viario que hoy monopolizan los coches, especialmente en la periferia (en el centro, si de verdad quitan los coches, no harían falta) para que los madrileños y las madrileñas puedan venir en bici al centro desde sus barrios. Vías ciclistas segregadas se llaman estos artilugios:


Parece ser que los ciclistas de Madrid ya se han reunido con el nuevo Ayuntamiento, y sus propuestas son de todo menos radicales. Yo iría mas lejos en la demanda de vías ciclistas segregadas, sobre todo en las grandes avenidas de la periferia, pero, en todo caso, ellos son los mejores interlocutores. Y estando en el Ayuntamiento un tal Carlos Corral, no debería ser difícil entenderse. 

Y organizar alguna marcha en bici aprovechando el momento no estaría nada mal: 

Esta foto obviamente no es de Madrid, pero me gusta



lunes, 26 de octubre de 2015

Por las rutas del PAB 2: Del Alamillo a Itálica, pasando por Camas

La ruta que voy a describir hoy se dirige a uno de los lugares mas visitados de la periferia inmediata de Sevilla: Las Ruinas de Itálica. Llegar en bici hasta allí es tremendamente sencillo y fácil. Tanto, que he tenido que dar un rodeo intencionado a la vuelta para hacer una ruta con una longitud mínimamente presentable. 



Para no salir por el mismo lugar que la vez anterior, esta vez decidí salir del Parque del Alamillo. Concretamente tomo el carril-bici bi-direccional que discurre paralelo al viaducto de la SE-30 a su paso por la entrada del Alamillo. 


Esta vía ciclista me lleva al inicio de otro carril-bici, esta vez mono-direccional y de color rojo que discurre elevado, en paralelo al viaducto y bien señalizado en su inicio.



Se trata de una construcción compleja, realizada por el Ministerio de Fomento de modo contemporáneo a la propia SE-30, que salva parte del viario de la Isla de la Cartuja mediante una pasarela hecha ex-profeso y discurre en general en paralelo a la propia SE-30 pero segregada del tráfico. Hace poco esta vía ciclista se encontraba en estado de abandono, con tapas de registro arrancadas y desplomes en muchos lugares (como por ejemplo en la pasarela citada) que daban lugar a peligrosos escalones. Ello dio lugar a una queja de "A Contramano" que parece haber dado resultado en parte, ya que los desperfectos mas evidentes parecen haber sido arreglados con urgencia, como puede verse en la foto adjunta.


De todas formas y aunque circular en bici por esta vía ciclista ya no puede decirse que sea peligroso, como lo era antes del "arreglo", éste no deja de ser una chapuza manifiestamente mejorable. Según datos de la Consejería de Fomento, por esta vía ciclista circulan una media de 119 ciclistas diarios, con picos que superan los 300 algunos domingos y festivos. Podrían ser muchos mas si estuviera en buen estado, por lo que sería interesante que el Ministerio de Fomento acometiera un arreglo en condiciones, o al menos dejara que fuera la propia Consejería (que parece estar dispuesta a ello) la que acometa las obras. Esperemos que la posición del Ministerio no sea, como ya ha sucedido alguna vez, aplicar la filosofía del "muerto el perro se acabó la rabia" y cerrar la vía ciclista, porque de ser así se encontrará con una fuerte oposición popular.

La vía ciclista discurre en paralelo a la SE-30, pasando sobre la corta del Guadalquivir


y, una vez superado el cauce vivo del Río, desciende de nuevo al nivel del suelo, donde continúa durante unas decenas de metros por un carril terrizo hasta llegar a un cruce sin señalizar, conveniente decorado con una escombrera


Debo tomar el camino de la derecha, también terrizo (si sigo de frente desembocaré en un polígono industrial sin mayor interés y si giro a la izquierda iré a parar a Camas). Dado que esta es la única parte del itinerario hasta Itálica que carece de pavimento, sería deseable pavimentarla adecuadamente y, sobre todo, señalizar el cruce como están señalizados otros tramos del itinerario.

Tras pedalear unos metros, llego a una carretera de escaso tráfico, que comunica la antigua "Estación de Camas" con Santiponce. El acceso a dicha estación queda a mi derecha y no resisto la tentación de echar un vistazo. La estación está en ruinas y tras tomar algunas fotos vuelvo a la carretera.


La carrtera discurre entre campos de cereal, con la torre del Monasterio de San Isidoro del Campo al fondo. El tráfico es escasísimo y se me ocurre que sería una buena idea señalizar esta carretera como la primera ciclo-carretera de Andalucía, con limitación de velocidad para los coches y preferencia de las bicicletas. Siendo Itálica un destino turístico muy demandado, sería una buena manera de promover esta ruta ciclo-turística.


Tras pasar bajo la SE-30 llego a Santiponce, donde debo girar a la derecha, ya por zona urbana, hasta Itálica. A la entrada de la zona arqueológica se ofrecen numerosos bares y restaurantes y, dentro de la misma, justo tras el control de entrada, un aparcamiento de bicicletas permite dejar las bicis con seguridad a los visitantes.


Regreso por el mismo camino, no sin echar un vistazo al pueblo de Santiponce y sus otras ruinas y monumentos, como el Teatro Romano o el Monasterio de San Isidoro.


Ahora podría regresar por el mismo camino, pero en lugar de ello decido seguir hacia Camas, por la vía ciclista que comienza justo en el mismo lugar por el que llegué a Santiponce


La vía ciclista discurre recta a un lado de la carretera que atraviesa el polígono industrial entre Santiponce y Camas. Observo como los coches parecen respetarla y no aparcar en ella, algo que me confirman amigos y conocidos, lo que demuestra una vez mas que cuando las cosas se hacen bien la gente las respeta.


Al llegar al paso elevado del ferrocarril, la vía ciclista tuerce a la derecha, para ascender hacia la nueva Estación de Camas. 


La nueva Estación de Camas está situada en lo alto de una colina y se accede a ella por una carretera con una acera y una vía ciclista de pendiente respetable. 


La única razón para ello parece ser la de ubicarla sobre tierra firme, una vez que las vías del tren hayan tocado suelo. Es posible que ello haya abaratado su construcción, pero desde el punto de vista de su eficacia como estación es un desastre, pues desincentiva a peatones y ciclistas. Hubiera sido mucho mejor situarla justo bajo el viaducto del tren, en el camino de Santiponce a Camas, donde la vía ciclista tuerce a la derecha para acceder a la estación. De ese modo la estación daría servicio a los trabajadores del polígono industrial y a los vecinos de Camas y Santiponce sin necesidad de obligarles a subir una cuesta nada despreciable a pie o en bicicleta.


Como puede verse en la imagen, hay espacio suficiente para albergar una estación a dos niveles, con el edificio de acceso y parkings para bicicletas a ras de suelo y andenes elevados a los que se accedería mediante escaleras, escaleras mecánicas y ascensores. No es nada que no se haga ya en otros países, como puede verse en la siguiente imágen


Otro fallo importante es el hecho de que la vía ciclista, con independencia de que de ella surja un ramal que suba a la estación, por pura lógica debería continuar en dirección a Camas por la misma calle por la que venía, algo que supondría apenas unos centenares de metros. 

Por mi parte, como estoy empeñado en visitar las vías ciclistas, subo hasta la estación y, tras echar un vistazo al moderno edificio, busco la forma de seguir hacia Camas. Efectivamente es posible bajar hacia Camas desde la estación, siguiendo la Vía Verde sobre el antiguo Ferrocarril Minero de Aznalcollar (también llamada Vía Verde de Itálica). Pero que nadie se piense que por este camino se llega a Aznalcollar, porque unos metros mas allá de la nueva Estación de Camas, el camino se vuelve impracticable, pese a estar señalizado como "Ruta del Agua" (?!).


Como casi todas las vías verdes, el camino es terrizo, mas apto para bicis de montaña que de paseo. Personalmente pienso que, al menos cerca de las zonas urbanas, este tipo de vías, que también se usan para el paseo a pie, deberían dotarse de pavimento asfáltico y acerados.


Llego a Camas por este camino, tras cruzar el antiguo puente del ferrocarril sobre el viario de Camas, que aún conserva restos de las traviesas


para llegar finalmente al parque lineal de la Circunvalación Este de Camas que alberga una vía ciclista de muy buena calidad


hasta llegar a la señalización que indica de nuevo el camino hacia el Parque del Alamillo. Hay que decir que esta zona del carril-bici metropolitano está muy bien señalizada. 

Al llegar a la señal correspondiente, giro a la izquierda para embocar una de las escasas calles residenciales que han sido señalizadas como tales en Sevilla y su entorno


que a su vez desemboca en una de las vías ciclistas mejor diseñadas del PAB, que discurre entre campos de algodón y cereal entre Camas y el Viaducto del Alamillo, en paralelo a un camino rural. Esta vía ciclista permite llegar desde Camas al Parque del Alamillo en apenas unos minutos de agradable paseo


en la que me cruzo con paisanos en bicicleta, ciclistas en ruta, coches y hasta carros de bueyes


Por desgracia la vía ciclista termina abruptamente en las proximidades del Viaducto del Alamillo, faltando la conexión (excepto por el consabido camino de tierra) con la vía ciclista paralela a este Viaducto, de la que ya hemos hablado al principio de esta entrada. El paisano al que me referí anteriormente y al que la vía ciclista le había "venido muy bien", lo explicaba así: "Parece que se les acabó el dinero".


Y ya solo me queda seguir hasta la vía ciclista ya descrita sobre el Viaducto y luego hasta la entrada del Parque


han sido en total no mas 21 km de agradable paseo.